¿Conoces el Feng Shui? lee aquí
|El feng shui es un antiguo sistema filosófico chino de origen taoista basado en la ocupación consciente del espacio. Es parte de un conocimiento chino denominado shenminwenhua, el cual trata sobre cosas misteriosas, secretas e imposibles de ver. Su territorio de acción se sitúa en la frontera de dos mundos: el de la tierra -denominado ken kai-, visible y físico, y el del cielo -denominado yu kai-, desconocido, invisible y vibrátil.
Feng Shui significa » viento y agua» . Conocido en occidente como la geomancia china, el feng shui estudia el flujo de la energía o Chi en el paisaje para determinar cómo influyen en las viviendas y en las personas que las habitan. Para esto el feng shui observa las montañas y los ríos, la forma de los edificios y las calles, también la distribución de los ambientes y las circulaciones en las casas y departamentos. Además se tienen en cuenta la teoría de los Cinco Elementos, los puntos cardinales según el Ba Gua y el tiempo según el calendario chino.
La distribución de los muebles, los colores usados en cada habitación, como también la ubicación del edificio son fundamentales en el Feng Shui, permiten que el ambiente este en equilibrio y nos aporte energía positiva. El Feng Shui utiliza colores, números, símbolos de animales y los cinco elementos (tierra, agua, fuego, metal y madera) para producir equilibrio y armonía en nuestro entorno.
Un ejemplo de decoración de un dormitorio según feng shui:
Los colores de la habitación según feng shui: Las paredes deben ser de colores pasteles suaves y las alfombras deben ser de colores claros para poder mezclarse con los demás elementos del dormitorio. Las sábanas, fundas, mantas y almohadas (que deben ser todas de telas naturales y no sintéticas) también deben ser de colores pasteles. Hay que evitar colores fuertes como el rojo y utilizar por el contrario colores suaves que inducen al descanso y sosiego.
Orientación de la cama según feng shui: Esto suspone uno de los aspectos fundamentales del dormitorio. Debe estar colocada de tal forma que la cabeza o los pies de la(s) persona(s) dentro nunca estén mirando la puerta. Es importante poder ver la puerta y orientar la cama para que nuestra cabeza esté apuntando hacia el norte o hacia el este. Nada debe colgar encima de la cama y no deben haber trastos por debajo. Una buena cabecera aporta sensación de seguridad. Se debe intentar no dormir por debajo de la ventana, pero si no se puede evitar, pues es importante tapar la ventana con una cortina opaca.